Fuegos y Amargores
Escrito por Juan Garcia Campal
Ahora, cuando me pongo a escribirles, sabado, la ola de calor que, como antaño la de pronografia y erotismo, nos invade por doquier se rompe afortunadamente en Bocamar gracias al rompeolas que representa el aire del noroeste. No arrastra el calor consigo, cierto. pero ayuda a acarrearlo a cuestas, a sobrellevarlo.
Rompe la bondad de la tarde de una exagerada columna de humo que, con su mal presagio, cruza hasta el oeste entristeciendo el paisaje y a quien lo contempla. Trayéndonos el recuerdo, la presencia de las vidas perdidas en la lucha contra el fuego, del daño producido en la naturaleza tan perezosa en su recuperación. Es ahora Castilla y León quien sufre la vehemencia del fuego. Abulenses y leoneses quienes principalmente sentimos el quemazon de la tierra, quienes vemos, ardientes de rabia e impotencia, la irracional manera en que nuestro patrimonio natural como humo se va.
No es descartable que sean estos incendios fortuitos, las investigaciones lo esclareceran, pero a mi me cuesta creerlo. Y aunque tambien me cueste creer que existan personas que atenten contra ese patrimonio común -se niega la razón a comprender las sinrazones- es de todo punto necesario que caiga sobre ellos, con todo rigor, el hacer de la justicia.
Estan quemando nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro. Y para ello que duda cabe que es imprescindible la colaboración ciudadana, la condena social, la intolerancia más absoluta con quien no muestre, no solamente el respeto, sino la prudencia mas absoluta con lo que, al margen de la titularidad, es un bien social, el patrimonio forestal. Nunca mas que ahora es cierto que cuando el monte se quema algo nuestro se quema.
En otro orden de cosas y no por ello llevando la mirada a lugares mas claros, en esta semana recuerdo la división de los sindicatos agrarios, perdon, organizaciones profesionales agrarias, con respecto a la propuesta contra la reforma del azucar. Mientras que la UPA no asistió a la manifestación del pasado viernes, si lo hicieron Asaja y Coag, acompañados como solidarios ciudadanos, de distinguidos cuadros del PP. En mi ignorancia, coincido con los convocantes en hacer de la remolacha "un problema de Estado".
Mas si tenemos en cuenta que de ella viene el azúcar y el tono amargo que ultimamente tiene la cosa politica en esta España nuestra.
Presten todas las administraciones, competentes e incompetentes, la debida atención al sector y su reforma y dulcifiquen los politicos el tono de sus decisiones. La ciudadania,los paganini, les ponemos mucho más humor a la cosa.
Nota del Editor:
En este asunto hay mucho irresponsable. Los de la "plataforma" y hablo en plural. Y los de la anti-plataforma (ASAJA). Y un gobierno de Castilla y León, convertido en una empresa de merchandising para la convocatoria de la manifestación. Que verguenza!.
Seguro que el café vespertino que se tome Jose Luis Rodriguez Zapatero, en la fiesta de UGAL, le sabra amargo, mas bien a cuerno quemado ...
Felipe Martinez Cañibano
El Mundo-La Cronica -08/08/05
Ahora, cuando me pongo a escribirles, sabado, la ola de calor que, como antaño la de pronografia y erotismo, nos invade por doquier se rompe afortunadamente en Bocamar gracias al rompeolas que representa el aire del noroeste. No arrastra el calor consigo, cierto. pero ayuda a acarrearlo a cuestas, a sobrellevarlo.
Rompe la bondad de la tarde de una exagerada columna de humo que, con su mal presagio, cruza hasta el oeste entristeciendo el paisaje y a quien lo contempla. Trayéndonos el recuerdo, la presencia de las vidas perdidas en la lucha contra el fuego, del daño producido en la naturaleza tan perezosa en su recuperación. Es ahora Castilla y León quien sufre la vehemencia del fuego. Abulenses y leoneses quienes principalmente sentimos el quemazon de la tierra, quienes vemos, ardientes de rabia e impotencia, la irracional manera en que nuestro patrimonio natural como humo se va.
No es descartable que sean estos incendios fortuitos, las investigaciones lo esclareceran, pero a mi me cuesta creerlo. Y aunque tambien me cueste creer que existan personas que atenten contra ese patrimonio común -se niega la razón a comprender las sinrazones- es de todo punto necesario que caiga sobre ellos, con todo rigor, el hacer de la justicia.
Estan quemando nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro. Y para ello que duda cabe que es imprescindible la colaboración ciudadana, la condena social, la intolerancia más absoluta con quien no muestre, no solamente el respeto, sino la prudencia mas absoluta con lo que, al margen de la titularidad, es un bien social, el patrimonio forestal. Nunca mas que ahora es cierto que cuando el monte se quema algo nuestro se quema.
En otro orden de cosas y no por ello llevando la mirada a lugares mas claros, en esta semana recuerdo la división de los sindicatos agrarios, perdon, organizaciones profesionales agrarias, con respecto a la propuesta contra la reforma del azucar. Mientras que la UPA no asistió a la manifestación del pasado viernes, si lo hicieron Asaja y Coag, acompañados como solidarios ciudadanos, de distinguidos cuadros del PP. En mi ignorancia, coincido con los convocantes en hacer de la remolacha "un problema de Estado".
Mas si tenemos en cuenta que de ella viene el azúcar y el tono amargo que ultimamente tiene la cosa politica en esta España nuestra.
Presten todas las administraciones, competentes e incompetentes, la debida atención al sector y su reforma y dulcifiquen los politicos el tono de sus decisiones. La ciudadania,los paganini, les ponemos mucho más humor a la cosa.
Nota del Editor:
En este asunto hay mucho irresponsable. Los de la "plataforma" y hablo en plural. Y los de la anti-plataforma (ASAJA). Y un gobierno de Castilla y León, convertido en una empresa de merchandising para la convocatoria de la manifestación. Que verguenza!.
Seguro que el café vespertino que se tome Jose Luis Rodriguez Zapatero, en la fiesta de UGAL, le sabra amargo, mas bien a cuerno quemado ...
Felipe Martinez Cañibano
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